Ciertos medicamentos son más propensos a interactuar con el CBD que otros.
Hablaremos sobre 25 clases distintas de medicamentos y las interacciones más comunes que hay que tener en cuenta antes de consumir CBD.
El CBD (cannabidiol) es uno de los suplementos para la salud más populares de la última década. Cada año, más personas recurren al CBD para aliviar condiciones de salud crónicas como la ansiedad, el dolor, la epilepsia, el insomnio, la depresión y más.
Todas estas condiciones ya tienen una variedad establecida de medicamentos para tratarlas. Por ello, es común que la gente use el CBD mientras toma otros medicamentos para tratar sus condiciones de salud.
Aunque se ha demostrado a través de rigurosos ensayos clínicos que el CBD es seguro, siempre existe la posibilidad de que se presente una interacción negativa con otros medicamentos. Algunos son más propensos a interactuar que otros.
En esta guía le diremos qué medicamentos tienen más probabilidades de interactuar con el CBD, la gravedad de la interacción y ofreceremos algunos consejos para minimizar las posibilidades de experimentar efectos secundarios.
→ Read in English: CBD Oil Drug Interactions: Is CBD Oil Safe To Use With My Medication?
Tipo de medicamento | Aumento de los efectos | Disminución de los efectos | Metabolismo hepático | Severidad de la interacción |
Inhibidores de la ECA | ✅ | ✅ | Moderada | |
Alcohol | ✅ | Leve | ||
Alfabloqueantes | ✅ | ✅ | Moderada | |
Inhibidores de la alfa-glucosidasa | ✅ | Leve | ||
Bloqueadores de los receptores de la angiotensina II | ✅ | ✅ | Leve | |
Anticonvulsivos | ✅ | ✅ | Moderada | |
Antibióticos | ✅ | ✅ | Moderada | |
Antihistamínicos | ✅ | Moderada | ||
Barbitúricos | ✅ | ✅ | Severa | |
Benzodiacepinas | ✅ | ✅ | Severa | |
Betabloqueadores | ✅ | ✅ | Leve | |
Anticoagulantes | ✅ | Severa | ||
Biguanidas | ✅ | ✅ | Leve | |
Bloqueadores de los canales de calcio | ✅ | ✅ | Leve | |
Agonistas centrales | ✅ | ✅ | Leve | |
Diuréticos | ✅ | ✅ | Leve | |
Inhibidores de la DPP-4 | ✅ | ✅ | Leve | |
Estimulantes/Eugeroicos | ✅ | ✅ | Leve | |
Agonistas del receptor GLP-1 | ✅ | Leve | ||
Antivirales para el VIH | ✅ | ✅ | Leve | |
Inhibidores de la HMG CoA reductasa | ✅ | Leve | ||
Insulina | ✅ | Leve | ||
Inmunosupresores | ✅ | Moderada | ||
Inhibidores de la MAO | ✅ | Leve | ||
Meglitinidas | ✅ | ✅ | Leve | |
Inhibidor de la recaptación de norepinefrina-dopamina (IRND) | ✅ | ✅ | Leve | |
Antiinflamatorios no esteroideos (AINEs) | ✅ | ✅ | Leve | |
Opiáceos Analgésicos | ✅ | ✅ | Leve | |
Inhibidores de la PDE5 | ✅ | Leve | ||
Inhibidores adrenérgicos periféricos | ✅ | ✅ | Moderada | |
Inhibidores de la bomba de protones (IBP) | ✅ | Leve | ||
Antagonistas e inhibidores de la recaptación de serotonina (AIRSs) | ✅ | Leve | ||
Inhibidores del SGLT-2 | ✅ | Leve | ||
Inhibidores de la recaptación de serotonina y norepinefrina (SNRIs) | ✅ | Moderada | ||
Inhibidores de la recaptación de serotonina (SSRIs) | ✅ | Moderada | ||
Estatinas | ✅ | Leve | ||
Sulfonilureas | ✅ | Leve | ||
Estimulantes | ✅ | ✅ | Leve | |
Antidepresivos tricíclicos | ✅ | Moderada | ||
Inhibidores de la 5 alfa-reductasa (5ARIs) | ✅ | Leve |
Una interacción agonista entre dos sustancias se produce cuando ambas tienen el mismo efecto en el organismo. Juntas, ambas sustancias actúan sobre los mismos receptores o causan un determinado efecto con la misma finalidad.
Un buen ejemplo de esto es el CBD y los medicamentos que reducen la presión arterial. Ambas sustancias ejercen un efecto sobre el sistema vascular para reducir la presión de las arterias. Cuando ambas sustancias se utilizan juntas, el efecto puede ser muy intenso, lo que provocaría una presión arterial tan baja que podría causar efectos secundarios como mareos o desmayos.
Una interacción antagonista es lo contrario de una interacción agonista. Esto ocurre cuando dos sustancias tienen efectos opuestos entre sí. Una sustancia puede ejercer una fuerza positiva sobre una función corporal, mientras que la otra anula este efecto estimulando en la dirección opuesta.
En la mayoría de los casos, los efectos negativos de esta interacción resultan en la ausencia de efectos en general. Por ejemplo, puede que esté utilizando un medicamento para tratar algo, pero la acción contraria del CBD anula los efectos del medicamento y hacen que sea menos efectivo. Como resultado, la medicación ya no funciona y los síntomas originales vuelven a aparecer.
Un ejemplo de esto es la interacción entre el CBD y los estimulantes.
El CBD es relajante (hace que la actividad neurológica disminuya), lo cual funciona en oposición directa a los estimulantes (aumentan la actividad neurológica). Si está usando estimulantes para tratar el trastorno de déficit de atención, el CBD puede inhibir la estimulación, haciendo que sienta los efectos de su trastorno con más fuerza.
Esta es la interacción más común que tiene el CBD con otros medicamentos.
Prácticamente todas las sustancias consumidas acaban siendo metabolizadas por el hígado. Los compuestos se absorben en el torrente sanguíneo, donde viajan por el cuerpo para ejercer sus efectos. Finalmente, se filtran a través del hígado. Ahí, un conjunto especializado de enzimas se encarga de descomponer el compuesto en una forma más pequeña.
Después, los metabolitos resultantes son filtrados por los riñones.
Hay docenas de enzimas en el hígado, cada una de ellas diseñada para descomponer un tipo específico de molécula. La mayoría de los fármacos necesitan varias de estas enzimas para descomponerse por completo, incluyendo el CBD.
Si dos o más compuestos necesitan las mismas enzimas para descomponerse, pueden acabar compitiendo entre sí. Esto puede ralentizar la tasa de metabolismo de cada compuesto, lo que lleva a una mayor duración de los efectos y una acumulación de cada compuesto en el cuerpo.
Imaginélo así, cuando va a la plaza de comidas de su centro comercial local, hay muchos lugares diferentes para pedir comida. Pero es posible que usted tenga preferencia por un determinado tipo de comida. Si muchas otras personas en el centro comercial prefieren la misma comida, habrá una cola para ese puesto, incluso si todos los demás restaurantes cercanos no tienen colas.
En general, es poco probable que el CBD tenga interacciones negativas importantes con esta clase de medicamentos, pero siempre hay una posibilidad debido a las similitudes de sus efectos.
Por sí solo, el CBD tiene efectos que reducen la presión arterial; esto podría hacer que la presión arterial disminuyese aún más cuando se utiliza en combinación con antihipertensivos de prescripción.
Sólo queremos que la presión arterial baje hasta que esté dentro del rango saludable (120/80). Si baja demasiado, es posible que no haya suficiente presión para bombear la sangre contra la gravedad hacia el cerebro. Cuando no hay suficiente presión para impulsar la sangre de forma eficiente hacia el cerebro, podemos marearnos o sentirnos aturdidos. En casos graves, puede provocar que nos desmayemos.
“ECA” significa Enzima Convertidora de Angiotensina; es la responsable de convertir la angiotensina I en angiotensina II, un potente vasoconstrictor (tensa las arterias y aumenta la presión arterial).
Los inhibidores de la ECA bloquean esta enzima para disminuir la tensión de las arterias. Se utilizan para combatir la presión arterial alta (hipertensión arterial).
Es poco probable que el CBD interactúe directamente con los inhibidores de la ECA, pero puede aumentar sus efectos. En algunos casos, la presión arterial puede bajar demasiado, lo que provoca efectos secundarios como mareos o desmayos.
Los receptores alfa-adrenérgicos se encuentran en todo el sistema arterial. Cuando estos receptores se activan, los músculos lisos de las arterias se contraen, estrechando la luz de las arterias para aumentar la presión arterial. Esta es una de las principales respuestas del cuerpo cuando estamos estresados.
Los alfabloqueantes inhiben los receptores adrenérgicos en las arterias y evitan la presión arterial alta causada por estos receptores.
El CBD puede disminuir aún más la presión arterial y provocar hipotensión, especialmente por la noche o cuando el usuario se siente especialmente relajado.
Las interacciones son raras, pero puede ser necesario reducir la dosis de CBD mientras se utilizan medicamentos alfabloqueantes.
La angiotensina II se crea con la ayuda de una enzima llamada ECA. En la mayoría de los casos, se utilizan primero los fármacos inhibidores de la ECA, pero si éstos no funcionan, puede utilizarse en su lugar un antagonista de los receptores de la angiotensina II (ARA-II). Los resultados son muy parecidos; los fármacos bloquean los efectos vasoconstrictores de la angiotensina II para reducir la presión arterial.
El CBD puede interactuar con estos fármacos potenciando sus efectos. El CBD es un conocido agente antihipertensivo que podría hacer que la presión baje demasiado y causar efectos secundarios como mareos y desmayos.
Los betabloqueantes se dirigen directamente al corazón. Reducen la frecuencia cardíaca y la fuerza de cada contracción. Esto ejerce menos presión sobre las arterias para reducir la presión arterial en general.
No es probable que el CBD interactúe con los betabloqueantes directamente, pero puede competir por el metabolismo en el hígado y, debido a la similitud de sus efectos, podría hacer que la presión arterial baje demasiado (hipotensión).
Los bloqueadores de los canales de calcio actúan reduciendo la cantidad de calcio que entra en las células musculares del corazón. El calcio es necesario para que los músculos se contraigan, por lo que al reducir las concentraciones de calcio en las células del corazón, estos medicamentos pueden reducir la fuerza contráctil del músculo cardíaco.
La reducción de la fuerza contráctil del corazón reduce la presión arterial sistólica de forma similar a los medicamentos betabloqueantes.
El CBD no interactúa con los bloqueadores de los canales de calcio directamente, pero puede hacer que la presión arterial baje demasiado (teóricamente). No es habitual que las personas que toman bloqueadores de los canales de calcio experimenten interacciones negativas con el CBD.
Los agonistas centrales realizan la misma función que los alfabloqueantes, es decir, impiden o reducen la contractilidad de las arterias para disminuir la presión arterial. Utilizan un mecanismo completamente diferente y suelen recetarse si los alfabloqueantes no funcionan.
Debido a la similitud de sus efectos, el CBD puede interactuar con estos medicamentos. Sin embargo, los efectos secundarios del uso de estas dos clases de medicamentos son poco comunes.
Los diuréticos son una clase de medicamentos que se utilizan para reducir la presión arterial favoreciendo la pérdida de electrolitos y líquidos del sistema vascular por medio de la orina. Si se disminuye el volumen de líquido en la sangre, la presión arterial desciende junto con ella.
Es poco probable que el CBD interactúe directamente con estos medicamentos; sin embargo, el CBD y los diuréticos producen el mismo resultado: la disminución de la presión arterial. Esto significa que tomar los dos compuestos juntos podría causar que la presión arterial baje demasiado, lo que provocaría mareos y desmayos.
Estos medicamentos fueron algunos de los primeros fármacos que se inventaron para tratar la presión arterial. La reserpina existe desde la década de 1950.
Estos medicamentos tienen muchos efectos secundarios negativos y hoy en día sólo se utilizan como último recurso (cuando otros antihipertensivos no funcionan).
El CBD puede interactuar con estos fármacos haciendo que la presión arterial baje demasiado. También puede interferir con el metabolismo de estos fármacos, lo que aumenta las posibilidades de experimentar efectos secundarios.
Las interacciones negativas entre los inhibidores adrenérgicos periféricos y el CBD son más comunes que las de muchos otros medicamentos para la presión arterial. Su combinación debe evitarse o realizarse con precaución.
Los anticoagulantes son una clase de medicamentos que se utilizan para tratar a los pacientes con enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. Funcionan bloqueando los factores de coagulación o el fibrinógeno para prevenir o desmantelar los coágulos de sangre que podrían obstruir las arterias y causar un ataque al corazón o un derrame cerebral.
El CBD no interactúa directamente con los anticoagulantes ni produce efectos similares. Sin embargo, se ha informado que ciertos anticoagulantes, como la warfarina (el anticoagulante más recetado), tienen interacciones negativas con el CBD [3].
La warfarina es particularmente difícil de metabolizar por el cuerpo y requiere el esfuerzo combinado de muchas enzimas CYP450 diferentes en el hígado, principalmente CYP3A4 y CYP2C19. Otras incluyen CYP1A1, CYP1A22, CYP2C19, CYP2D6 y CYP3A5.
Se ha demostrado que el CBD compite por el metabolismo con estas siete vías enzimáticas [4] y podría alentar el metabolismo de la warfarina.
A lo largo de varios días o semanas, las concentraciones de warfarina pueden aumentar en el torrente sanguíneo, lo que conlleva una probabilidad mucho mayor de que se produzcan efectos secundarios negativos causados por el propio fármaco. Estos efectos secundarios pueden ser potencialmente mortales.
Por lo tanto, el CBD no debe tomarse junto con anticoagulantes de ningún tipo, a menos que lo indique su médico tratante.
El CBD es un potente analgésico, pero funciona a través de mecanismos completamente distintos a los de la mayoría de los analgésicos. Esto significa que no es tan probable que interactúe directamente con los analgésicos comunes. Aun así, hay algunas formas en las que el CBD puede interferir con diferentes tipos de analgésicos.
La más común es a través de la competencia por el metabolismo hepático. El CBD interferirá con la capacidad del hígado para metabolizar los analgésicos, lo que podría aumentar las probabilidades de que se produzcan efectos secundarios de la medicación, especialmente en el caso de aquellos analgésicos que se utilizan con regularidad.
El CBD también comparte una serie de efectos secundarios similares a los de los analgésicos, como sedación, deshidratación, pérdida de apetito, diarrea y presión arterial baja.
Sólo se debe tomar CBD junto con analgésicos (tanto de venta libre como recetados) después de consultar con un profesional médico. También es probable que haya que reducir la dosis de CBD cuando se combina con analgésicos.
Los analgésicos opiáceos son muy comunes. Hay muchos tipos de opiáceos que se recetan para controlar el dolor de todo origen. Estos analgésicos actúan activando los receptores opiáceos del dolor situados en la médula espinal y el cerebro.
Dichos receptores funcionan como puerta de entrada para las señales de dolor que viajan desde el cuerpo hasta el cerebro. Cuando se activan, ya sea por los fármacos opiáceos o por los opiáceos presentes de forma natural en nuestro cuerpo (llamados endorfinas), las puertas se cierran y reducen la señal de dolor antes de que llegue al cerebro.
Los opiáceos son analgésicos muy eficaces, pero tienen un lado oscuro. El sistema opioide también está íntimamente conectado con nuestro sistema de recompensa mediado por la dopamina. La activación de los receptores opiáceos provoca sensaciones de euforia y placer, a las que podemos volvernos fácilmente adictos.
El CBD se utiliza a menudo como alternativa a los medicamentos opiáceos para evitar la adicción, especialmente en el caso de los dolores crónicos que requerirán un tratamiento regular a lo largo de semanas, meses o años. Tomar opiáceos durante largos periodos de tiempo aumenta drásticamente las posibilidades de desarrollar una adicción.
La mayoría de los opiáceos no interactúan de manera importante con el CBD, pero existe la posibilidad de una interacción negativa. El CBD puede aumentar los efectos secundarios de los opiáceos al competir por el metabolismo en el hígado y podría, por lo tanto, aumentar las posibilidades de una sobredosis.
Siempre debe hablar con su médico antes de tomar CBD si está usando medicamentos opiáceos para el dolor. Su médico puede aconsejarle una dosis modificada de ambas sustancias para reducir el riesgo de experimentar efectos secundarios.
“AINE” significa Antiinflamatorio No Esteroideo. Estos son los analgésicos de venta libre más comunes. Algunos de los ejemplos más conocidos son Tylenol, Advil, Aleve y Aspirina.
Estos medicamentos actúan bloqueando las enzimas COX-1 o COX-2, que son las responsables de crear las moléculas proinflamatorias. El bloqueo de esta enzima detiene la inflamación que provoca diversas formas de dolor, como en el caso de las lesiones, los dolores de cabeza o el dolor de estómago.
Varios estudios han demostrado que el CBD y los AINEs actúan juntos de forma sinérgica [1, 2], lo que significa que entre ellos potencian sus beneficios para reducir tanto el dolor como la inflamación.
Muchas personas utilizan los medicamentos AINE y el CBD juntos, pero hay que tener cuidado. Debido a la sinergia entre estas dos sustancias, es importante utilizar una dosis menor para evitar los efectos secundarios.
Los AINEs y el CBD se metabolizan a través de algunas de las mismas enzimas hepáticas. La competencia por las enzimas hepáticas vuelve más lento el metabolismo de ambos compuestos y causa que permanezcan en el torrente sanguíneo durante más tiempo. Esto sólo puede causar problemas si se utilizan dosis repetidas.
Dado que los AINEs suelen utilizarse sólo ocasionalmente o durante un corto período de tiempo, es poco probable que la concentración de estos medicamentos en la sangre aumente hasta alcanzar niveles tóxicos. El consumo diario de la aspirina es la excepción en este caso, pero la dosis diaria es baja y es poco probable que cause problemas.
Si consume algún AINE diariamente, debe consultar con su médico antes de tomar CBD. Si las concentraciones del AINE son demasiado elevadas, pueden provocar daños hepáticos graves.
Uno de los beneficios más conocidos del CBD es su capacidad para controlar los síntomas de la ansiedad. El CBD funciona regulando el sistema endocannabinoide y un neurotransmisor conocido como GABA.
Los medicamentos recetados para controlar la ansiedad (ansiolíticos) también funcionan a través del GABA, que puede considerarse el “pedal de freno del sistema neurológico”. Este neurotransmisor es el responsable de frenar la actividad neurológica cuando se vuelve hiperactiva (como es el caso de la ansiedad).
Dado que el CBD y los ansiolíticos comparten un mecanismo de acción similar, existe una posibilidad especialmente alta de que ambos interactúen. Es común que la gente mezcle los dos para poder tomar dosis más bajas de los ansiolíticos recetados y evitar la formación de dependencia y adicción.
Estas sustancias sólo deben combinarse tras consultar a un profesional médico. Puede ser necesario reducir la dosis de los medicamentos ansiolíticos para evitar el riesgo de efectos secundarios.
Las benzodiacepinas son la clase de fármacos más recetados para controlar la ansiedad. Actúan aumentando la capacidad de unión del GABA para inhibir la actividad eléctrica en el cerebro. Son muy eficaces para prevenir o revertir los ataques de ansiedad, así como para favorecer el sueño de las personas que padecen insomnio o para reducir la frecuencia y gravedad de las convulsiones.
Por desgracia, estos medicamentos también son muy adictivos. Algunos fármacos, como el Xanax, pueden provocar dependencia y adicción en tan sólo dos semanas.
Es muy probable que el CBD interactúe con las benzodiacepinas. La interacción aumenta los efectos de ambas sustancias, lo que puede volverlas demasiado fuertes. Las personas que toman benzos y CBD dicen sentirse más sedadas de lo habitual.
Algunas personas utilizan el CBD como auxiliar para dejar las benzodiacepinas, aumentando gradualmente la dosis de CBD y disminuyendo la dosis de benzos con el tiempo.
Consulte siempre a su médico antes de combinar estos medicamentos por cualquier motivo.
Los barbitúricos son una clase antigua de medicamentos que sirven para aliviar la ansiedad, el insomnio y las crisis convulsivas. Han sido sustituidos en gran medida por las benzodiacepinas, que son más eficaces y menos peligrosas.
Esta clase de medicamentos tiene un efecto similar en el cuerpo que el CBD y las benzodiacepinas. No es una buena idea combinar el CBD con los barbitúricos por ningún motivo. Es muy probable que la combinación provoque efectos secundarios graves.
El CBD es un excelente antidepresivo, pero sólo con el uso prolongado. Los beneficios del CBD sobre la depresión tardan mucho en manifestarse. El CBD favorece el equilibrio hormonal y neuroquímico y alivia la inflamación en el cerebro que podría estar contribuyendo a los síntomas depresivos.
La mayoría de los antidepresivos recetados funcionan a través de mecanismos completamente distintos y es poco probable que interactúen directamente con el CBD. En cambio, la mayoría de los peligros asociados a la combinación de estas sustancias provienen de la competencia por el metabolismo hepático.
Los antidepresivos se utilizan a diario, por lo que cualquier cambio en la tasa de metabolismo de estos fármacos podría conducir a un aumento gradual de las concentraciones en la sangre. Sin supervisión, las concentraciones del fármaco pueden alcanzar niveles tóxicos, lo que provocaría efectos secundarios graves como el síndrome de la serotonina.
El CBD sólo debe utilizarse junto con los antidepresivos tras consultar con su médico.
Los “ISRS” son los Inhibidores Selectivos de la Recaptación de Serotonina, la clase de antidepresivos más utilizada en la actualidad.
La serotonina es uno de los principales reguladores del estado de ánimo, por lo que estos fármacos se utilizan para aumentar las concentraciones de serotonina en las sinapsis con el fin de potenciar el estado de ánimo. Cada vez que se libera serotonina, ésta se reabsorbe en las sinapsis, donde se descompone. Los ISRS actúan bloqueando la reabsorción de la serotonina, permitiendo que permanezca en las sinapsis durante más tiempo.
En general, se puede tomar CBD junto con antidepresivos, pero con precaución. La mayoría de los peligros de esta combinación vienen con la mezcla a largo plazo. El CBD puede ralentizar el metabolismo de los ISRS y hacer que se acumulen en el torrente sanguíneo.
Si la dosis de ISRS es demasiado alta, puede causar algo llamado síndrome de la serotonina, que ocurre cuando los niveles de serotonina son demasiado altos.
Los efectos secundarios de esta condición pueden ser graves y deben evitarse a toda costa.
Si va a mezclar el CBD con los ISRS, asegúrese de consumir dosis más bajas de CBD, tomar descansos cada dos días y consultar a su médico si experimenta cualquier efecto secundario.
“IRSN” son las siglas de los Inhibidores de la Recaptación de Serotonina y Norepinefrina. Son una opción secundaria para tratar la depresión cuando los ISRS no han funcionado. Los IRSN son también una buena opción para las personas que tienen tanto depresión como ansiedad.
Estos medicamentos actúan a través del mismo mecanismo que los ISRS, pero con una clara diferencia. Estos medicamentos aumentan las concentraciones tanto de serotonina como de la norepinefrina (otro neurotransmisor).
El CBD puede interactuar con los medicamentos IRSN de dos maneras principales: compite por el metabolismo del medicamento en el hígado (principalmente en la enzima CYP3A4) y puede anular algunos de los beneficios de los IRSN (en teoría).
Al igual que los ISRS, los IRSN siguen un esquema de dosificación muy específico. La dosis se administra cuidadosamente para lograr niveles constantes del fármaco en el organismo. La dosis se calcula en función del peso y se titula para proporcionar niveles constantes para el metabolismo individual del paciente.
Cuando el CBD se incorpora a la mezcla, puede alterar la tasa de metabolismo de estos medicamentos. Con el tiempo, la concentración de los fármacos puede aumentar, lo que acaba provocando signos de toxicidad o sobredosis.
Los antidepresivos tricíclicos son una clase antigua de medicamentos para la depresión. Todavía se utilizan hoy en día, pero sólo cuando otros tratamientos no dan resultados.
Los antidepresivos tricíclicos bloquean la recaptación de serotonina y norepinefrina, pero también interactúan con otros neurotransmisores. Se les considera una “droga problemática” porque interactúan con receptores que no siempre queremos afectar. Esto les da un montón de efectos secundarios adicionales, que otros fármacos como los ISRS o los IRSN no tienen.
El CBD y los tricíclicos pueden combinarse, pero siempre hay que consultar primero a un profesional médico. Hay una mayor probabilidad de causar efectos secundarios graves con dosis más altas de CBD en comparación con otros medicamentos antidepresivos.
“MAO” son las siglas de la Monoamino Oxidasa, que es la principal enzima responsable de la descomposición de los neurotransmisores monoamina. Entre ellos se encuentran la serotonina, la dopamina y la norepinefrina, todos ellos implicados en la regulación del estado de ánimo.
Los inhibidores de la MAO se utilizan para aumentar la concentración de neurotransmisores en el cerebro y mejorar el estado de ánimo.
Esta clase de antidepresivos no es tan popular como los ISRS o los IRSN; se cree que son menos eficaces y que producen efectos secundarios con más frecuencia que estas otras clases de fármacos. Algunas personas consideran que los inhibidores de la MAO son más eficaces para regular el estado de ánimo que los otros antidepresivos. Cada persona es diferente, por lo que es habitual que el médico pruebe varios medicamentos para ver qué funciona cuando trata a un nuevo paciente con depresión.
El CBD no interactúa directamente con los inhibidores de la MAO, pero puede competir por el metabolismo en el hígado. Muchos inhibidores de la MAO son metabolizados por las enzimas CYP2D6, CYP1A2 y CYP2C19, todas las cuales también se ven afectadas por el CBD.
Como todos los antidepresivos, los inhibidores de la MAO se utilizan a diario y de forma constante. Si el metabolismo se ralentiza lo suficiente como para que estos medicamentos se acumulen en el torrente sanguíneo, podría provocar efectos secundarios o toxicidad. Si se combinan estas dos sustancias, es aconsejable tomar dosis más bajas de CBD y hacer descansos periódicos.
También debería consultar a su médico antes de tomar cualquier otra sustancia si le han recetado inhibidores de la MAO.
“AIRS” son las siglas de Antagonistas e Inhibidores de la Recaptación de Serotonina. Son un tipo de medicamento antidepresivo, ansiolítico y también ayudan a conciliar el sueño. Rara vez se utilizan como primera línea de tratamiento para la depresión, pero se suelen recetar a los pacientes que padecen de depresión, ansiedad e insomnio juntos.
Estos medicamentos bloquean el receptor de serotonina 5-HT2A y bloquean los transportadores de serotonina, lo que provoca un aumento de la actividad de la serotonina en el cerebro.
Estos medicamentos dependen en gran medida de las enzimas CYP3A4 del hígado. Cuando se toman con CBD, las concentraciones de esta medicación pueden aumentar, lo que conlleva un mayor riesgo de efectos secundarios de la medicación y mayores posibilidades de que se forme una dependencia del medicamento.
Los efectos secundarios más comunes de los medicamentos AIRS incluyen dolores de cabeza, náuseas, problemas digestivos, confusión, agitación y sedación.
Los antipsicóticos atípicos son antagonistas de la serotonina y la dopamina. Esta clase de medicamentos se utilizan para tratar la esquizofrenia, el trastorno bipolar, el autismo y el trastorno depresivo mayor.
Estos tienen un fuerte efecto sedante, por lo que es mejor utilizarlos por la noche antes de acostarse. Actúan bloqueando los receptores de dopamina y serotonina en el cerebro.
Hay muchos efectos secundarios asociados a estos medicamentos, muchos de los cuales pueden agravarse cuando se toman con CBD. Algunos ejemplos son la sequedad de boca, la presión arterial baja y la memoria. No se considera seguro mezclar medicamentos con CBD y antipsicóticos atípicos sin consultar primero con el médico que los prescribe. Los pacientes mayores de 65 años o a los que se les ha diagnosticado demencia son los que corren más riesgo.
Antipsicóticos que pueden interactuar con el CBD:
“IRND” significa Inhibidores de la Recaptación de Noradrenalina-Dopamina. Este grupo de medicamentos se utilizan para tratar la depresión y otras enfermedades, como el trastorno de déficit de atención e hiperactividad (TDAH), la narcolepsia y la enfermedad de Parkinson.
Los IRND funcionan aumentando la concentración de dopamina y noradrenalina en el cerebro mediante el bloqueo de los canales de recaptación que conducen a su destrucción.
Es poco probable que el CBD tenga interacciones significativas con estos medicamentos, pero puede hacer que las concentraciones de los IRNDs aumenten si se usan de forma constante. El CBD puede interferir con el metabolismo de estos medicamentos, ya que requiere las enzimas CYP2B6. El CBD compite por estas enzimas, pero no tanto como lo hace con otras enzimas.
Muchos de los efectos de los medicamentos IRND son de naturaleza estimulante. El CBD tiene un efecto más inhibidor en el cerebro, lo que podría anular muchos de los beneficios de los IRND y reducir su eficacia. Algunos sugieren que este efecto es beneficioso para aliviar varios de los efectos secundarios comunes de estos medicamentos. Se necesita más investigación para entender completamente si es seguro o no mezclar el CBD con los medicamentos IRND.
Si usted toma alguna medicación psiquiátrica, debe hablar con su médico antes de probar el CBD.
Los fármacos estimulantes se utilizan para tratar enfermedades como el TDAH, la narcolepsia o el síndrome de fatiga crónica. A menudo se utilizan para aumentar la atención y la concentración en el trabajo o la universidad. Los estimulantes funcionan incrementando la secreción de neurotransmisores como la dopamina y la norepinefrina.
Muchas personas toman el CBD junto con medicamentos estimulantes para contrarrestar algunos de los efectos secundarios de estos fármacos, como la tensión muscular y ansiedad.
Siempre se recomienda tener precaución cuando se mezclan sustancias que tienen efectos opuestos como en este caso; los estimulantes llevan al sistema nervioso hacia la sobrecarga y, por otro lado, el CBD suprime la actividad del sistema nervioso.
Es poco probable que se produzcan interacciones graves cuando se combinan los estimulantes y el CBD, pero es conveniente ser prudente con la dosis de ambos.
Consulte primero con su médico y empiece con una dosis muy baja de CBD. Puede aumentar la dosis gradualmente añadiendo 2 mg de CBD a cada una de sus dosis diarias hasta que encuentre el equilibrio adecuado para su cuerpo.
Es posible que el CBD reduzca la eficacia de los medicamentos estimulantes, lo que podría impedir que los medicamentos hagan su trabajo.
Algunos de los otros cannabinoides de las plantas de cannabis también pueden interferir con los estimulantes, principalmente el THC.
Los estimulantes y el THC son una mala combinación y suelen provocar efectos secundarios. Asegúrese siempre de que los productos de cannabis que utiliza estén libres de THC u otros cannabinoides relacionados como el CBN o la THCV.
Los inmunomoduladores son fármacos que interactúan con el sistema inmunológico. Algunos aumentan la actividad inmunitaria, otros la suprimen. Se utilizan para bloquear la inflamación, tratar las reacciones alérgicas, tratar los trastornos autoinmunes o estimular la actividad inmunitaria durante las infecciones o el tratamiento contra el cáncer.
El CBD tiene una fuerte correlación con el sistema inmunológico, pero no interactúa con la mayoría de los medicamentos inmunomoduladores. Algunas excepciones son los antihistamínicos y los inmunosupresores.
Los antihistamínicos se utilizan principalmente para tratar las reacciones alérgicas. La histamina es un compuesto liberado por un tipo especial de células inmunitarias llamadas mastocitos.
Estas células permanecen inertes hasta que algo las activa (un alérgeno).
Cuando se activan, los mastocitos se abren, liberando grandes cantidades de histamina y otros compuestos proinflamatorios. Estos compuestos son los que provocan los síntomas que experimentamos como una reacción alérgica (secreción nasal, ojos llorosos, hinchazón, picor y estornudos o tos).
Uno de los principales efectos secundarios de los antihistamínicos es la sedación. La histamina también desempeña un papel en la regulación del estado de alerta y la estimulación mental, por lo que el bloqueo de este compuesto puede provocar sedación y fatiga.
Las cualidades sedantes y relajantes del CBD pueden intensificar aún más los efectos secundarios de los antihistamínicos.
Si ya está experimentando efectos secundarios por el uso de antihistamínicos, es aconsejable evitar el uso del CBD. Aunque no es probable que esta sustancia provoque interacciones graves, es posible que empeore los efectos secundarios que ya está experimentando.
El CBD no debe consumirse nunca junto con inmunosupresores, a menos que lo recomiende directamente el médico que lo prescribe.
El CBD tiene propiedades inmunoestimulantes, especialmente útiles para las personas que tienen la función inmunitaria suprimida. Tomar CBD con inmunosupresores puede contrarrestar o anular los efectos de los medicamentos inmunosupresores. Esto puede hacer que los fármacos sean ineficaces, provocando un empeoramiento de la enfermedad subyacente.
Dado que los inmunosupresores se utilizan para condiciones de salud graves o para prevenir el rechazo después de un trasplante de órganos, puede ser muy peligroso si los medicamentos no funcionan eficazmente.
Los CDC informan que aproximadamente 1 de cada 10 estadounidenses ha sido diagnosticado con diabetes (2020). Esto hace que los medicamentos para la diabetes sean una de las preocupaciones más comunes para las personas que quieren consumir CBD.
Hay docenas de medicamentos que los médicos pueden recetar para controlar la diabetes, dependiendo de la gravedad de la enfermedad. La mayoría de estos medicamentos no interactúan directamente con el CBD, pero es aconsejable empezar con una dosis baja de CBD para reducir el riesgo de interacciones negativas.
El CBD tiene algunos efectos reguladores del azúcar en la sangre, lo que podría hacer que la presión arterial baje demasiado cuando se toman medicamentos como la metformina o los inhibidores de la DPP-4. Si la presión arterial baja demasiado, puede provocar hipoglucemia y desmayos, lo que puede ser peligroso.
Hable siempre con su médico antes de usar el CBD si está tomando medicamentos antidiabéticos.
La alfa-glucosidasa es una enzima del sistema digestivo encargada de descomponer los azúcares para que puedan ser absorbidos. Los inhibidores de la alfa-glucosidasa bloquean los efectos de esta enzima y reducen la cantidad de azúcar que puede entrar en el torrente sanguíneo.
Es poco probable que el CBD tenga una fuerte reacción a estos medicamentos. Existe un ligero riesgo de que la interacción provoque que los niveles de azúcar en sangre bajen demasiado debido a sus efectos similares. También es posible que la absorción del CBD se vea afectada cuando se toman inhibidores de la alfa-glucosidasa al mismo tiempo, lo que conduce a una menor eficacia del CBD.
Hoy en día sólo hay una biguanida en el mercado, la metformina. Esta biguanida no sólo es el tratamiento más común para la diabetes de tipo II, sino que es uno de los medicamentos más recetados en el mundo.
La metformina actúa bloqueando la producción de glucosa en el hígado para reducir los niveles de azúcar en la sangre y aumentar la sensibilidad (eficacia) de la insulina en el cuerpo.
Hay dos interacciones potenciales entre el CBD y la metformina:
Dicho esto, muchas personas toman CBD con su metformina sin ningún efecto secundario. Algunos informes sugieren incluso que el CBD y la metformina tienen una interacción positiva, lo que conduce a resultados aún mejores cuando se combinan.
El riesgo de esta interacción es bajo pero no inexistente. Si está en tratamiento con metformina, siempre debe consultar a su médico sobre el CBD antes de tomarlo.
“DPP-4” son las siglas de Dipeptidil Peptidasa-4, que es una enzima encargada de descomponer las incretinas, una clase de enzimas digestivas. Las incretinas estimulan la producción de insulina después de una comida y bloquean la producción de glucagón (que actúa en oposición a la insulina).
Los inhibidores de la DPP-4 bloquean esta enzima, lo que provoca un aumento de la concentración de incretinas. Se cree que esto favorece el aumento de la insulina y reduce los niveles de glucagón.
Muchos de estos medicamentos, en particular la saxagliptina y la sitagliptina, requieren mucha atención de las enzimas hepáticas, como las enzimas CYP3A4 y CYP3A5 [7]; también tienen una vida media muy larga. Esto aumenta el riesgo de presentar efectos secundarios cuando se utiliza en combinación con cualquier otra sustancia que requiera el metabolismo de estas enzimas, incluyendo el CBD.
Además de la saxagliptina y la sitagliptina, hay otros inhibidores de la DPP-4 que no dependen tanto de estas enzimas [8] y es mucho menos probable que interfieran con el CBD.
Los inhibidores de la DPP-4 se toman a diario, por lo que es posible que, con el tiempo, cuando se utilizan junto con el CBD, las concentraciones del medicamento se acumulen hasta alcanzar niveles tóxicos en el torrente sanguíneo. Esto llevaría a una mayor tasa de efectos secundarios causados por la propia medicación, incluyendo náuseas, síntomas parecidos a los de la gripe o reacciones cutáneas dolorosas.
En segundo lugar, el principal efecto de los inhibidores de la DPP-4 es la reducción de los niveles de glucosa en sangre. Esto podría sumarse a los efectos hipoglucémicos del CBD y provocar síntomas asociados a la hipoglucemia.
“GLP-1” se refiere al Péptido Similar al Glucagón-1, que es un medicamento basado en las incretinas. Estos medicamentos son similares a los inhibidores de la DPP-4, pero en lugar de bloquear la enzima que destruye las incretinas, estimulan los receptores de incretinas con versiones sintéticas de estas importantes hormonas.
Los efectos son una mayor sensación de saciedad y un aumento de la secreción de insulina. Se utilizan para la pérdida de peso y el control del azúcar en sangre.
Los agonistas del GLP-1 no requieren las enzimas CYP450 en gran medida y es poco probable que tengan una fuerte interacción con el CBD.
La principal preocupación en cuanto a las posibles interacciones entre el CBD y los agonistas del receptor GLP-1 son los efectos contra el apetito. Tanto el CBD como los agonistas del GLP-1 reducen el apetito.
Las meglitinidas actúan estimulando la liberación de insulina en los pacientes diabéticos; estimulan directamente las células beta del páncreas, donde se produce la insulina.
Las posibilidades de interacción entre el CBD y las meglitinidas son muy bajas, pero no inexistentes. El impacto combinado de estas sustancias en la reducción del azúcar en la sangre a través de los efectos de la insulina podría conducir a la hipoglucemia (bajo nivel de azúcar en la sangre).
Las meglitinidas se metabolizan principalmente por CYP2C8 y CYP3A4. Se ha demostrado que el CBD sólo compite por la primera enzima, pero es poco probable que provoque problemas significativos de metabolismo hepático competitivo con esta clase de fármacos.
“SGLT-2” se refiere al Transportador de Sodio-glucosa, que participa en la reabsorción de azúcar a través de los riñones. La sangre se filtra primero a través de los riñones, los cuales eliminan varios metabolitos y el azúcar. Gran parte del azúcar eliminado se reabsorbe posteriormente a través de los transportadores SGLT-2.
Estos medicamentos bloquean dichos transportadores para evitar que el azúcar vuelva a entrar en el sistema, lo que conduce a una reducción general de los niveles de azúcar en sangre.
Es poco probable que el CBD interactúe negativamente con estos medicamentos pero, teóricamente, podría provocar una disminución excesiva del azúcar en sangre, lo que causaría una hipoglucemia (niveles bajos de azúcar en sangre).
Las sulfonilureas actúan de forma similar a las meglitinidas, estimulando la secreción de insulina del páncreas.
Es poco probable que el CBD interactúe con estos medicamentos directamente; sin embargo, es posible que la combinación de ambas sustancias tenga un impacto más fuerte y podría causar que los niveles de azúcar bajen demasiado.
La hipoglucemia puede provocar mareos, falta de coordinación, cambios de humor y desmayos.
Las tiazolidinedionas son una clase de medicamentos que se unen y activan un receptor que se encuentra en las células grasas llamado receptor gamma activado por el proliferador de peroxisomas (PPARγ). Esta clase de medicamento aumenta la maduración de las células grasas y la conversión de azúcar en grasa almacenada, reduciendo así los niveles de azúcar en sangre. El aumento de peso es el principal efecto secundario de estos medicamentos.
No se conocen interacciones entre el CBD y las tiazolidinedionas, pero en teoría, la combinación podría provocar una caída excesiva de los niveles de azúcar en sangre.
Además, se ha demostrado que el CBD interactúa con el depósito de grasa, lo que podría interferir con la capacidad de estos medicamentos para ejercer sus efectos. Esto podría anular su eficacia.
Hasta que se realicen más investigaciones, no se recomienda combinar el CBD con las tiazolidinedionas a menos que sea bajo el consejo de su médico.
La insulina es el principal tratamiento para los pacientes con diabetes de tipo I (diabetes juvenil). Las personas con este tipo de diabetes no pueden producir su propia insulina.
Los estudios han demostrado que el CBD puede reducir la resistencia a la insulina y los niveles de azúcar en la sangre; sin embargo, no hay ninguna indicación de que el CBD bloquee los efectos de la insulina o que ocasione que los niveles de azúcar en la sangre bajen de forma no natural.
Dicho esto, la mayoría de los expertos son cautelosos a la hora de mezclar el CBD con la insulina por miedo a provocar problemas de hipoglucemia.
La mayoría de los medicamentos para la disfunción eréctil funcionan de la misma manera: promueven la dilatación de los pequeños vasos sanguíneos que suministran el flujo de sangre al pene. Al ensanchar las arterias, es más fácil para el hombre lograr una erección.
Es poco probable que el CBD interactúe con estos medicamentos, pero podría interferir con el metabolismo al competir por la enzima CYP3A4. Esto resultaría en el incremento de la potencia de los efectos del CBD así como de los medicamentos para la disfunción eréctil. Por ello, el riesgo de experimentar efectos secundarios de estos medicamentos puede aumentar. Los efectos secundarios más comunes son dolores de cabeza, indigestión, diarrea o priapismo.
Si toma alguno de estos medicamentos, asegúrese de utilizar una dosis de CBD más conservadora que la que podría tomar de otro modo.
“5-ARI” son las siglas de los Inhibidores de la 5-alfa-reductasa. Son una clase de fármacos que bloquean la enzima que realiza la conversión de la testosterona en dihidrotestosterona (DHT).
Cuando la testosterona se convierte en DHT con la ayuda de la enzima 5-alfa-reductasa, se cree que altera el ciclo de vida del folículo piloso, haciendo que el pelo se vuelva más corto, más fino y, finalmente, deje de crecer por completo. Este cambio se relaciona con la hiperplasia benigna de próstata (HBP), condición en la que se presenta un aumento de tejido que provoca un mayor tamaño del órgano.
Los inhibidores de la 5-alfa-reductasa son medicamentos habituales para tratar tanto la calvicie masculina como la HBP.
El CBD puede interferir con el metabolismo de estos medicamentos ya que compite por las enzimas CYP3A4. Aunque la probabilidad de experimentar efectos secundarios negativos con esta combinación es rara, no es inexistente. Las interacciones podrían incluir un mayor riesgo de efectos secundarios de los medicamentos, como el aumento del tamaño de los senos, erupciones cutáneas y disminución de la libido.
Las estatinas se utilizan para reducir la producción de colesterol en el hígado. Funcionan bloqueando una enzima llamada HMG-CoA reductasa.
Aunque no es probable que el CBD interactúe con las estatinas directamente y tiene un conjunto de efectos completamente distinto, existe un gran potencial para que el CBD interfiera con el metabolismo de las estatinas, la mayoría de las cuales dependen en gran medida de las enzimas CYP3A4 del hígado.
Tomar CBD y estatinas simultáneamente podría conducir a un aumento de las concentraciones séricas del fármaco con el tiempo.
Hable siempre con su médico antes de utilizar el CBD con sus estatinas.
Los inhibidores de la bomba de protones (IBP) son los medicamentos más recetados para tratar la acidez de estómago, la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) y otros trastornos relacionados con los ácidos estomacales. Los IBP actúan bloqueando las células parietales del estómago que segregan el ácido estomacal.
Estos medicamentos se metabolizan en gran medida por las enzimas hepáticas CYP2C19 [9], que también es uno de los sustratos utilizados para metabolizar el CBD, aunque en menor medida. Esto podría ser una fuente de interacción negativa con el CBD.
La interacción negativa más probable es que el usuario experimente los efectos del CBD con mayor potencia debido a un metabolismo más lento.
Opte por una dosis menor de CBD si está usando inhibidores de la bomba de protones.
El asma es un trastorno inmunitario crónico que afecta a los pulmones. Cuando un individuo se expone a un alérgeno, el sistema inmunológico hace que las vías respiratorias se cierren y segreguen una mucosidad espesa que puede dificultar la respiración. Los medicamentos para el asma se centran en bloquear la respuesta inmunitaria y forzar la apertura de las vías respiratorias para permitir que fluya más aire hacia los pulmones.
El CBD interactúa fuertemente con un medicamento para el asma en particular, conocido como teofilina. El CBD puede acelerar la excreción de teofilina del cuerpo, lo que conduce a una reducción de su eficacia.
Otras interacciones pueden ocurrir con medicamentos a base de esteroides, como el albuterol y el bromuro de ipratropio. El CBD relaja el sistema nervioso simpático, lo que puede contrarrestar los efectos de estos medicamentos, que dependen de la activación del sistema nervioso simpático para ensanchar las vías respiratorias y tratar los síntomas.
Las formas inhalables de CBD deben ser evitadas por cualquier persona con un historial de asma, incluyendo los vaporizadores.
Hay cuatro tipos principales de antimicrobianos: antibacterianos, antifúngicos, antivirales y antiparasitarios (este incluye antihelmínticos, antiamebianos y antiprotozoarios).
Hay tantos compuestos diferentes que actúan como antimicrobianos que es difícil agruparlos todos en uno. Cada compuesto funciona de forma diferente, se metaboliza de forma diferente y produce diferentes efectos secundarios.
Algunos estudios sugieren que el CBD puede hacer que ciertos antibióticos sean más eficaces y puede ofrecer una solución prometedora al problema de la resistencia a los antibióticos [6].
Pero este no es el caso de todos los antimicrobianos. Algunos antimicrobianos compiten por las mismas enzimas en el hígado. Todos los antimicrobianos son diferentes, así que asegúrese de hablar con su médico y preguntarle si es seguro o no tomar CBD junto con su receta.
El CBD es en sí mismo un potente antiemético, es por esto que podría hacer sinergia con otros medicamentos antieméticos, haciendo que los efectos de ambas sustancias sean más eficaces.
Sin embargo, también existe la posibilidad de una interacción negativa a través de otros mecanismos. El CBD podría ralentizar el metabolismo de los medicamentos antieméticos, lo que podría causar una acumulación tóxica si la medicación se utiliza a diario.
Algunos antieméticos actúan a través del sistema serotoninérgico, por lo que, si no se eliminan del organismo como se espera, podría producirse una peligrosa afección denominada síndrome de la serotonina.
El CBD sólo tiene una leve interacción con el alcohol. Ambas sustancias tienen acciones sedantes e hipotensoras; tomarlas juntas puede hacer que estos efectos secundarios sean más pronunciados.
Es raro que la gente experimente algo más que interacciones leves con estas dos sustancias, pero en algunos casos, el impacto puede ser grave, provocando mareos, pérdida de coordinación, desmayos o letargo y malestar.
El CBD es un suplemento para la salud muy seguro en general. Rara vez produce algo más que efectos secundarios leves y tiene un bajo potencial para interactuar con la mayoría de los medicamentos u otros suplementos para la salud.
Sin embargo, todavía es posible que se produzcan interacciones negativas con los medicamentos.
Hay tres formas en las que el CBD puede interactuar con otros medicamentos:
Los fármacos más preocupantes que hay que tener en cuenta al consumir CBD son las benzodiacepinas, los barbitúricos, los inmunosupresores o los fármacos utilizados para reducir la presión arterial.
Si está tomando algún medicamento recetado, es una buena idea hablar con su médico sobre el uso del CBD primero. Si consume CBD, empiece con una dosis muy baja al principio y sólo aumente una vez que sepa cómo responde su cuerpo. Si toma medicamentos a largo plazo, también es una buena idea tomar descansos periódicos del CBD.