Deliciosas, afrutadas y con una infusión de delta 8 THC.
Precaución: Estos productos son psicoactivos.
Estas gominolas psicoactivas tienen los mismos efectos que se esperan de otros productos de THC, pero más suaves.
A todo el mundo le gusta una buena gominola de THC, aquí le hablaremos sobre las mejores disponibles con variedad delta 8.
Precaución: El delta 8 THC es un cannabinoide psicoactivo. Se considera que es aproximadamente un 50% más potente que el THC (delta 9), pero brinda una experiencia más relajada y tranquila.
Ninguno de los productos de esta lista contiene más del límite federal del 0.3% de delta 9 THC.
→ Read in English: Best Delta 8 THC Gummies: Top Brands, Dosage, & Safety
Hay dos tipos principales de THC. El delta 9 THC es la forma más común y es el compuesto al que la gente suele referirse cuando habla de productos con THC.
El delta 8 THC tiene la misma forma pero con una ligera diferencia en la estructura química.
El delta 9 THC tiene un doble enlace en la novena cadena de carbono. El delta 8, en cambio, tiene este doble enlace en la octava cadena de carbono.
Una gominola de delta 8 THC se hace infundiendo la forma activa de delta 8 THC con una base de caramelo de goma. La textura de la gominola ayuda a ocultar el sabor del THC, facilita la dosificación y aumenta la vida útil del extracto.
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El rango de dosis estándar de delta 8 THC está entre 10 y 60 mg.
En general, la potencia del delta 8 es la mitad de fuerte que aquella del delta 9, por lo que usted puede multiplicar la dosis de THC que se toma normalmente por dos para encontrar la dosis aproximada de delta 8.
Una dosis de 10 mg suele ser suficiente para causar efectos psicoactivos leves. Si está probando el delta 8 THC por primera vez, esta es la mejor dosis para empezar.
Una vez que se haya familiarizado con el funcionamiento del delta 8 THC en su cuerpo, puede modificar la dosis y tomar un poco más. La mayoría de las personas añaden unos 5 mg por dosis hasta que encuentran lo que les funciona mejor.
No es conveniente que tome una dosis alta en su primer intento por la posibilidad de que sea sensible al compuesto. Una vez que haya comido una gominola, siempre puede tomar más, pero si toma demasiado no puede dar marcha atrás. Exceder su dosis puede provocar efectos secundarios y ser incómodo para los que no están acostumbrados.
Las gomitas vienen en dosis previamente establecidas; esta es una de sus principales ventajas. Si tiene una gominola que contiene 10 mg de D8 THC, sabe que cada pieza tendrá exactamente la misma cantidad. No es necesario medir ni calcular.
Si busca una dosis modificada, siempre puede cortar las gomitas en mitades o incluso en cuartos para obtener una dosis menor.
Por ejemplo, si quiere tomar una dosis de 10 mg de D8 THC, pero sus gomitas contienen 20 mg cada una, simplemente córtelas por la mitad para obtener dos piezas de 10 mg.
Hay muchas ocasiones en las que puede querer hacer esto. Por ejemplo, digamos que acaba de tomar una gominola de 20 mg y está sintiendo los efectos pero quiere que sean un poco más fuertes. En lugar de tomar otra dosis completa de 20 mg (lo que podría hacer que los efectos fueran demasiado intensos), puede cortar las gominolas en mitades o cuartos para obtener una dosis de 5 o 10 mg.
Utilizando esta técnica, puede medir los efectos de sus gomitas con la misma precisión que lo haría con una tintura convencional de delta 8 THC.
El delta 8 THC en sí mismo es seguro. Nunca ha habido estudios que sugieran lo contrario.
Incluso las dosis muy altas de delta 8 THC o de su gemelo casi idéntico, el delta 9 THC, nunca han provocado una sobredosis o la muerte.
El principal peligro que hay que tener en cuenta cuando se trata del delta 8 THC no es el compuesto en sí, sino la posibilidad de que existan adulterantes y contaminantes en los productos.
El delta 8 THC no es producido por la planta de cannabis, en cambio, se fabrica como un subproducto natural del delta 9 THC al descomponerse. La mayor parte del THC se descompone en otro cannabinoide, llamado CBN (cannabinol), pero un pequeño porcentaje se convierte en la versión delta 8 en su lugar.
Esto significa que tanto las plantas de cáñamo como las de marihuana contienen sólo trazas de delta 8 THC. No hay suficiente en su forma natural dentro de la planta para que sea de alguna utilidad significativa.
La marihuana contiene concentraciones mucho más altas de delta 8 THC que el cáñamo, pero si los fabricantes extraen el D8 de estas plantas, se considera ilegal a nivel federal.
Para evitar estos dos problemas, la mayoría de las empresas convierten el cannabinoide más abundante, el CBD, en delta 9 THC y luego convierten el delta 9 THC en delta 8.
Este proceso es muy complicado y requiere mucha habilidad por parte de los técnicos de laboratorio. Algunos pasos requieren ingredientes tóxicos como ácido clorhídrico, solventes orgánicos y reactivos de metales pesados.
Una vez completada la conversión, es necesario eliminar cualquier rastro de estos compuestos del producto final. Un laboratorio especializado podrá hacerlo con un equipo de laboratorio caro y de alta tecnología. Las muestras se analizan continuamente a lo largo del proceso hasta que no queda ningún rastro de estas sustancias químicas.
Los fabricantes con poca integridad pueden pasar por alto algunos de estos pasos de control de calidad y permitir que algunos de estos elementos tóxicos permanezcan en el producto final. Esto, por supuesto, es un peligro inherente.
La única manera de asegurarse de que el producto final está libre de todos estos contaminantes es probarlo mediante técnicas de análisis como la espectrometría de masas o la cromatografía de gases. Esto debe hacerse siempre en un laboratorio de terceros para obtener resultados imparciales y fiables.
El gobierno federal distingue entre las dos plantas distintas de cannabis: el cáñamo y la marihuana.
En Estados Unidos, la marihuana es ilegal a nivel federal debido a la presencia del compuesto psicoactivo, THC. La forma específica de THC mencionada es la forma delta 9; el delta 8 THC no se menciona en la ley federal, lo que mucha gente considera que significa que es legal.
Por desgracia, no todo es tan sencillo. La normativa establece además que cualquier derivado sintético del THC también es ilegal, lo que puede incluir el delta 8 THC. Por el momento, el delta 8 THC vive en una zona gris legal; algunos abogados sostienen que es completamente legal, otros interpretan lo contrario. En última instancia, todo se reduce a cómo interpreta la DEA estas leyes (lo que aún no se ha determinado oficialmente).
Hay varios estados que han prohibido específicamente el delta 8 THC, como Alaska, Arizona, Arkansas, Colorado, Delaware, Idaho y Mississippi.
Si vive fuera de Estados Unidos, consulte nuestro artículo completo sobre la legalidad del delta 8 THC.
Para resumir las diferencias entre estos dos compuestos, vamos a dividirlas en tres categorías.
El delta 9 THC es claramente ilegal a nivel federal. Solo algunos estados selectos permiten la venta y posesión de THC en todas sus presentaciones.
El delta 8 THC está en un área gris. Con la ley, se puede interpretar que es legal, pero también se podría interpretar como ilegal.
El delta 8 THC tiene efectos psicoactivos iguales a los del delta 9 pero son la mitad de potentes. Esto significa que tendría que tomar el doble de delta 8 THC para obtener la misma intensidad de efectos que con el d9.
Los efectos secundarios más comunes e incómodos del THC son la aceleración del ritmo cardíaco, la ansiedad y la paranoia.
Una de las mayores ventajas de usar delta 8 THC en lugar de el delta 9 convencional es la incidencia significativamente más baja de padecer estos tres efectos secundarios. Esta es la razón principal por la que tanta gente utiliza la forma delta 8 en lugar de la delta 9. Pueden disfrutar de todos los beneficios que ofrece el THC, como la reducción del dolor, la mejora de la calidad del sueño, la relajación muscular, etc., sin sentir pánico y ansiedad.
El espacio del delta 8 THC puede ser desalentador si no está seguro de lo que debe buscar, así que hemos destacado los cuatro factores clave que debe tener en cuenta mientras hace una compra. Sin duda alguna, el más importante es el primer punto.
Esta es la consideración más importante que hay que tener en cuenta a la hora de comprar delta 8 THC. Consulte nuestra lista negra de proveedores de delta 8 THC para ver un desglose detallado de las empresas que no proporcionan suficientes pruebas para sus productos.
Un laboratorio de terceros se define como una instalación que realiza pruebas y análisis que no tiene ninguna afiliación con el fabricante. Esta es la única manera de asegurar resultados imparciales. Si el laboratorio encuentra impurezas, las declarará en el informe. Suelen estar regulados por asociaciones de su propio sector para asegurarse de que cumplen todas las normas y ofrecen pruebas precisas.
Estas pruebas son la mejor manera de demostrar que lo que una empresa afirma de sus productos es cierto.
No esperamos que sea un experto en la interpretación de pruebas de laboratorio, pero al menos debería revisar que todas las pruebas estén presentes en el sitio web de la empresa. Si no ve ninguna prueba disponible o faltan algunas de las que se enumeran a continuación, es una buena idea ponerse en contacto con la empresa para obtener más información o buscar otra marca que ofrezca estas pruebas.
Las pruebas de terceros más importantes que hay que buscar son:
La industria del delta 8 es muy nueva, por lo que la mayoría de las empresas de este espacio no llevan el tiempo suficiente en el mercado como para tener una reputación notablemente buena o mala.
Sin embargo, el delta 8 THC tiene una fuerte comunidad de usuarios en lugares como Reddit. Muchos de estos usuarios dejan reseñas sobre las empresas a las que hacen pedidos en línea.
Hay muchas empresas de cannabis fraudulentas que se aprovechan de la inmadurez de la industria en este momento. Por esta razón, nuestra lista de marcas que evitar es mucho más larga que nuestra lista de marcas recomendadas. Es habitual que las empresas vendan productos de baja calidad a precios elevados y luego hagan spam con reseñas falsas de sus propios productos en Reddit u otros foros públicos.
Es importante leer más de una reseña de una empresa, especialmente en los foros. Al igual que las empresas sin ética escriben comentarios positivos falsos sobre sus propios productos, a menudo escriben críticas negativas falsas sobre la competencia.
Hay varias maneras de hacer gomitas con delta 8. La más común es simplemente infundir el destilado de delta 8 THC en una base de goma de gelatina junto con algunos saborizantes afrutados.
Hay algunas empresas que utilizan una base de celulosa en su lugar y agentes aromatizantes naturales para hacer sus gomitas veganas y más naturales.
Las gominolas son un producto muy sencillo; no es necesario añadir docenas de productos químicos para que la gominola tenga un buen sabor y consistencia. Sin embargo, algunas empresas añaden todo tipo de cosas extrañas a sus gominolas. Es una buena idea comprobar la lista de ingredientes antes de comprar para asegurarse de que no hay aditivos extraños.
La mayoría de las gomas de delta 8 THC anuncian que tienen una concentración muy baja de delta 9 THC para que sigan siendo legales. Revise dos veces las pruebas de laboratorio para asegurarse de que esto es cierto, porque si el contenido de delta 9 THC es demasiado alto, podría estar pidiendo productos ilegales por error.
Algunas empresas ni siquiera intentan mantener bajos los niveles de delta 9 THC, y de hecho es bastante normal encontrar concentraciones hasta del 15% en el producto final. Estos productos sólo son legales en los estados que tienen leyes de marihuana recreativa en vigor.
El delta 8 THC recientemente se puso de moda. Es popular por sus efectos psicoactivos más suaves en comparación con los productos de THC convencionales y por el menor riesgo de provocar ansiedad.
Las dos presentaciones más comunes de delta 8 son las gominolas y los cartuchos.
Al comprar gomitas de delta 8 THC, busque siempre la evidencia de que la empresa está solicitando pruebas de laboratorio de terceros para demostrar que sus productos están libres de contaminantes como metales pesados, blanqueadores o solventes residuales del proceso de fabricación.